O que busco no I Ching?
O que busco no I Ching ?
Somos conscientes de las dificultades que nos presenta la existencia, en esta época se agudiza la sensación de malestar en su vorágine donde el tiempo vuela y los espacios se diluyen.
Las redes sociales, las comunicaciones instantáneas que no nos permiten entender cabalmente el mensaje cuando ya desaparece, las relaciones afectivas que tienden a disolverse a cada momento dejándonos aún más inseguros y solitarios, nos deja a veces abatidos.
Nos sentimos desorientados, confusos, no sabemos hacia dónde ir. Hemos perdido el compás del Tao, descompasamos nuestro movimiento y no fluimos con los ritmos cósmicos.
Ahí es cuándo miramos a nuestro alrededor, arriba y abajo y encontramos al I Ching, el Libro de las Mutaciones, el Gran Maestro, pleno de misterios y riquezas. Debemos zambullirnos en las aguas profundas de la vida-muerte para encontrar la piedra preciosa, la perla perfecta que está allí, en las profundas y fascinantes zonas invisibles.
Busco lo invisible. Pulso, hago movimientos, sonidos, quiero expandir mis percepciones para ver más, conocer más.
Pero…a todos se nos escapa, no se deja ver ni conocer.
Hay realidades en el Universo que no podemos abarcar.
Las monedas o los tallos de milenrama son la conexión, así como la vara del mago busca rozar lo infinito.
Cuando tomo las monedas y las lanzo algo sucede, entro en una zona diferente donde se despliega otro mundo.
La conexión con lo invisible se da cuando me abro a lo misterioso. Perceptiva, receptiva, mi mente cobra mayor dimensión y puedo conectar…y tal vez comprender.
Humildemente me acerco y pregunto, pido orientación, consejo, entonces los Ancianos Sabios se presentan con su Compasión.
¿Qué busco en el I Ching?
En su origen el I Ching no tenía palabras solo dos trazos, uno completo, lleno, y el otro partido, que iban apareciendo como signos en los elementos de la naturaleza y que eran leídos para saber los designios de los dioses.
Luego se incorpora las palabras, imágenes y sentencias que hacen de él un consejero, el guía espiritual.
Podemos tomar al Libro de las Mutaciones como oráculo para entrever la trama invisible que nos envuelve, o tomar su poder sapiencial, llenándonos de su riqueza para construirnos mejores seres humanos.
Allí el misterio de esta “necesidad” del I Ching, necesito saber algo de lo que “está pasando” y los hilos que en la trama invisible ya se están tejiendo para aparecer luego en su manifestación visible como suceso futuro.
Estar en el TAO (siento que no “se vuelve” al TAO, nunca nos hemos ido solo que estamos descompasados) es vivir caminando con ojos, mente, sentidos, abiertos.
¡Hasta pronto, los saludo!
Teresa
