Relación entre el I Ching y el ADN
Relación entre el I Ching y el ADN
Es conocido el aporte que Leibniz hizo tanto a las matemáticas como a la filosofía.
Por ejemplo, el Sistema Binario que desarrolló tantas otras posibilidades.
El sistema binario es un sistema numérico en base 2, con lo que todo se representa con solo dos guarismos.
Pero esto ya se utilizaba aún antes que Gottfried Leibniz (1646-1716) descubriera este sistema numérico que luego sería utilizado por las computadoras ya que el matemático se inspiró en un libro muy antiguo del cual escuchó hablar a un jesuita que evangelizaba en China.
El Libro era el I Ching, donde se manejan conceptos taoístas de Ying y Yang, inscribiendo sus movimientos con líneas enteras o partidas lo que da lugar a los hexagramas, compuestos de dos trigramas.
¡y para mayor asombro…una correlación entre el Código Genético y el I Ching!
Sabemos que el Código Genético está representado por las 64 combinaciones de tripletes o codones y los aminoácidos.
En el I Ching encontramos combinaciones de sus trigramas que generan 64 hexagramas.
ADN
“Comprende todos los procesos vitales de todos los seres vivos, cuya estructura, forma y herencia son programadas con preciso detalle”.
Sus propiedades son las mismas para todos los seres.
I Ching
“Los 64 hexagramas del I Ching simbolizan todas las situaciones de la vida humana entre el cielo y la tierra”.
Los procesos de la existencia del mundo manifestado y no-manifestado están incluidos en los trigramas y hexagramas con los que el I Ching nos habla.
En la presentación de la edición del Tao Te King dice Onorio Ferrero:
Según sea el Yin el que preceda al Yang o viceversa, obtendremos dos tipos de ordenamientos con una correspondencia directa con el código genético, en el primero, e inversa en el segundo, a los cuales hemos llamado primer y segundo orden natural y que enumeraremos conforme al sistema binario de Leibniz, quien le dio al Yin la equivalencia de CERO (0) y al Yang la de UNO.
La secuencia de Ying oscuro y receptivo antecediendo a Yang , luminoso y expansivo, que corresponde al sentido que los taoístas dan al devenir de la existencia, parte del alma-embrión que contiene en sí todas las posibilidades, hacia la expansión en un movimiento de torbellino de la existencia de múltiples seres -los diez mil seres- que es el Yang expansivo, la secuencia Ying-Yang.
Las ventajas de agua, de la humedad, de lo blando, humilde, receptivo es la posibilidad que se pueda realizar el luminoso Yang. Y expandirse.
El Texto del Tao Té King habla de que para realizar el Yang debemos partir del Ying.
Esto fue invertido por el patriarcal sistema del Rey Wen, al Yang, lo luminoso, se le otorgó características patriarcales, siendo lo Ying lo oscuro y hasta temible.
Volvamos al tema…
Una de las características es su complementariedad, en la doble hélice las tiras de nucleótidos van en sentido diferentes, opuestas pero complementarias.
En I Ching se pueden colocar las dos tiras de hexagramas poniendo su opuesto complementario,
Katya Walter en el año 2003 publica un libro “Double Bubble Universe” en www.doublebubbleuniverse.com en el cual el patrón fractal existe en la estructura del espacio, tiempo, materia y energía donde se encuentra por primera vez las cuatro bases nitrogenadas del ADN en correspondencia con los cuatro bigramas del I Ching.
Esto da muestra de las relaciones existentes entre el I Ching y el Código Genético, no podemos tomarlas como simples coincidencias sino ver en ello algo más profundo y que es necesario desentrañar, mantener un diálogo fecundo entre ciencia experimental y Sabiduría Perenne.
Aún queda mucho a investigar, las profundas enseñanzas del Libro y la riqueza de conocimientos que otorga la ciencia deberán actuar conjuntas para comprender más y mejor los misterios de nuestro mundo.
